Cannonball Parts - Nuevos horizontes para Flathead, Knuckle y Pan
Si eres uno de los afortunados que poseen y ruedan en un Flathead, Knuckle o Panhead, posiblemente conoces ese miedo a quedarte colgado si algo no va bien en el interior de tu viejo motor con medio siglo a cuestas. ¿Cómo consigues las piezas necesarias sin caer en la bancarrota? ¿Te metes en una subasta online hasta las tres de la mañana para ser superado por otra puja? Buena suerte. Puedes probar en mercadillos, si dispones de todo el tiempo del mundo, claro. ¿Usar NOS de un provedor fiable? No está mal, si ese sistema NOS que ha dejado el motor insevible durante cincuenta años sigue en buen estado.
Aquí llegan las buenas noticias: Para hacer que esos viejos Big Twin vuelvan a ronornear, ahora tenemos piezas disponibles Cannonball para Flat, Knuckle, y Panhead.
COMO ANTIGUO, PERO NUEVO
Nuestro trabajo en Cannonball es hacer auténticas reproducciones de componentes como carcasas de motor, culatas, cilindros, bombas de aceite, balancines, árboles de levas y engranajes de cambio. Todo se fabrica con especificaciones lo más parecidas a la pieza original que se sustituye. Se fabrican minuciosamente en Alemania con las últimas tecnologías para la máxima precisión. Además usamos materias primas que los caballeros de Milwaukee sólo podrían soñar cuando hacían sus Flatties, Knuckles y Pans de antaño.
FASTER CANNONBALL, GO, GO!
Un motor por sí mismo hace ruido, pero no va a ninguna parte. Y es por eso que tenemos más Cannonball para Big Twin recién salido de la máquina del tiempo: Tenemos horquillas de ballesta, Horquillas Springer I-Beam, manillares, depósitos estilo WR, llantas MAG, frenos y guardabarros, y estamos preparando más productos.
TRAS LAS HUELLAS DE ERWIN
La marca Cannonball es un homenaje al recordman Erwin Gerorge 'Cannonball' Baker, quien en 1914 cruzó el contiente norteamericano de costa a costa en el inaudito tiempo de once días en su moto. Posiblemente, Erine estaría de acuerdo en que sólo con palabras no llegas a ningún sitio.
Es por eso que tomamos todos nuestros componentes, los examinamos, optimizamos, los montamos en un chasis y les propinamos todo el castigo que podemos encontrar en miles de kilómetros de carretera. Cientos de horas y algunas fundidas más tarde, cuando todo va como la seda, ya están listos para todos esos Flathead, Knucklehead y Panhead que ruedan por ahí.